Cuando Nicky Jam alzaba la mano, veinte mil almas lo seguían. Tiene ese efecto hechizante, de aguja hipodérmica, que toca la fibra más sensible de la piel y emite una orden irresistible. Con el artista de ascendencia boricua sobre el escenario hay que bailar y cantar sí o sí.
El Romelio Martínez estuvo a la altura de un show que reclaman como obligatorio los fanáticos del reguetón, o galas como los premios Billboard. Miles de pantallas de celular iluminadas era el fondo que Nicky, desde la tarima, veía mientras abría su show, a las 11:50 p.m., con Travesuras, su máximo hit.
Sensuales bailarinas y exponentes de break dance sellaron ese toque internacional del espectáculo que suponía la presencia del reguetonero en el Mix Festival, concierto organizado por la emisora Mix, de la organización radial Olímpica.
El otrora ‘Cangri’, que consumieron las drogas en algún momento de su carrera y lo apartaron de las tarimas, exorcizó sus males con música urbana. Les puso el mejor final de cuento con temas como Si tú no estás, coreada de comienzo a fin.
“Ustedes saben que me encanta Barranquilla. Siempre que vengo hay calor humano y cariño, los amo. De costeño a costeños nos entendemos muy bien”, agradeció al público el gesto de acompañarlo a entonar la letra de Suele suceder y Piensas en mí.
Luego dejó salir otro de sus dotes, subrayando por qué es llamado ‘el Rey de la Improvisación’ con un rapeo casi imposible que terminó con un aplauso atronador.
No pudo parar ahí la euforia de sus seguidores, pues representantes de la disquera Codiscos interrumpieron su presentación para registrar un momento casi inédito en la historia de la música actual en la ciudad: la entrega de un Disco de Diamante por las más de 50 millones de reproducciones del tema Travesuras, que en realidad supera las 200 millones de vistas. “Gracias a ustedes, estas cosas existen”. Y se puso romántico.
Un piano, ese instrumento que muchos pensarían antónimo del reguetón, dio los primeros acordes de El perdón, el tema que lo convierte en el latino favorito de la Billboard en lo que va de corrido de este año. También, en el preferido de los fanáticos curramberos, que la gritaron a más no poder.
Un adelanto de Materialista, que será su próxima canción, así como Ahí vamos, Yo no soy tu marido y Voy a beber, entre otras, hicieron parte de su lista de éxitos en vivo, que se extendió durante casi una hora en un show que el Romelio siempre tendrá para recordar, no solo por la cantidad de público que ingresó –tal vez las 20 mil boletas que se entregaron gratuitamente se queden cortas para contabilizar la cantidad de gente–, sino por calidad de las presentaciones en general, con punto aparte para la de Nicky Jam, quien demostró por qué, actualmente, es el líder del género.
La antesala. Óscar Prince y Luisito fueron los encargados de abrir el concierto a eso de las cuatro de la tarde. Los del Pentágono, Sebastián Yatra, Young F, Zayder, Sonny y Vaech, entre otros exponentes de los ritmos urbanos, se presentaron mientras iba cayendo la noche.
Lil Silvio y El Vega subieron al escenario a las 9 p.m., seguidos por Twister, Rayo y Toby, Alkilados, Kevin Flórez y Valentino, justo antes de Nicky Jam.
Desmanes en la tarde
A través de videos en redes sociales, los barranquilleros reportaron desórdenes en el preámbulo del concierto.
En YouTube quedaron registrados enfrentamientos entre asistentes que saltaron de las tribunas a la grama del estadio. Se oye a la gente gritar y se observa poco personal de seguridad y de Policía para contener la situación.
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